Ayer, día 8 de diciembre, las personas que probablemente más hayan marcado mi vida desde el día en que nací, cumplian 25 años casados, sí, sus bodas de plata.
Esas personas son mis padres. Es increible ver como pasa el tiempo, yo recuerdo muchos aniversarios a su lado... pero este es especial, no sólo porque llevan venticinco años juntos, sino por lo distinto que ha sido este año a muchos otros... distinto por problemas económicos, la muerte de mi abuela paterna...tan distinto que hace unos meses todos temíamos que mi padre no pudiera seguir con nosotros, porque su corazón nos dió un buen susto este verano...
Pero aquí estamos otra vez. Juntos. Como una familia. Tengo tantas cosas que agradecerles... que necesito otros venticinco para estar diciendoles todo lo que siento, y lo agradecido que estoy por ser su hijo, algo realmente increible.
Ayer noche hablando por teléfono con mi madre, ella me decía que "por lo menos se tenían el uno al otro".
Y mi hermana y yo les tenemos a ellos. Sin ellos, sin sus esfuerzos, yo hoy no sería el que soy, no soñaría con lo que sueño cada noche, y no tendría mi memoria plagada de tantísimos grandes recuerdos.
Por eso, cuando me preguntan cual es mi ideal de una familia, yo siempre respondo que ya lo tengo, porque mi familia es mi ideal.
Ojalá algún día yo sea capaz de hacerlo tan bien como vosotros habéis sabido hacerlo, y pueda mirar a los ojos de mi pareja tras veinticinco años juntos como vosotros lo haceis, con ese cariño.
Para vosotros Papá y mamá. Os quiero. Gracias por ser como sois, y hacerme sentir como me siento.
Despertando cada día, luchando desde que abro los párpados. Salgo a la calle a enfrentarme a la rutina, a luchar contra ella entornando las mejores de mis sonrisas. Viviendo deprisa, trabajando, comiendo, hablando con amigos y conocidos... y por supuesto hay días que encierran momentos especiales, únicos en si mismo... conocer a alguien especial, reconciliarte con ese amigo, descubrir algo maravilloso de alguien, o saborear una sonrisa furtiva en las escaleras del metro... y los días siguen pasando.
Las noches llegan con cada día, y las noches se hacen reflexivas por sí mismas. Buscar razones, justificaciones, y revivir maravillosos momentos... echar de menos también, evitar la melancolía, y apaciguar un alma inquieta, que muchas veces no hay quien la silencie...
Cada día es un mundo en sí mismo. Nunca se sabe como te pueden cambiar las cosas en un destello de un nuevo día...
Y otra capa más de tierra por favor, con un poco de suerte dejo de respirar, y quizás sea capaz de ahogar estos sentimientos que me derrumban.
Harto de sufrir, harto de hacer daño, me enterraré, y me aletargaré. Evitaré sentir, y hacer sufrir.
Enterrarme en vida, enterrando sentimientos, tratando de olvidar, quizás en un futuro, sirvan para hacer germinar nuevas plantas, que hagan florecer mi vida.
Cuantas cosas busco cambiar en mi vida !
Todos necesitamos cambiar cosas en nuestra vida, sobre todo aquellas que no solo nos afectan a nosotros, sino que afectan a los demás... a la gente que nos rodea.
Yo, tengo el serio problema de, muchas veces, dejarme llaver por mis impulsos, y pararme a reflexionar después. En ocasiones es bueno, pero otras... es nefasto, sobre todo cuando esas decisiones acarrean consecuencias que hacen daño a la gente que tengo cerca, gente que importa.
Intentar cambiar... para mejorar, parar ser mejor amigo de mis amigos, y para seguir sintiéndome más yo mismo...algo que necesito, algo que busco.
Sentir... y luego pensar.
Gran error... sólo a veces.
Conocer,
interes despertado de su dulce sueño,
curiosidad.
Torrente de emociones,
posteriores pensamientos fríos,
solitarios.
Derrumbamiento.
Dudas, muchas dudas,
formando un inmenso mar.
Los sentimientos se enfrían,
y la razón calla al corazón.
El tiempo corre siempre en contra,
y a veces, deja entreveer, como una cortina traslúcida,
el final que se evita aceptar.
y agachas la cabeza al futuro,
y silencias tu alma, y la sigues condenando
por evitar enfrentarte a una encrucijada.
Pero ahí está: hay que elegir,
conformarse, o dar otra oportunidad al corazón,
reanimarle para ver si es posible seguir sintiendo,
o elegir el camino fácil.
Evitar ese mar de dudas,
darme media vuelta y enterrarlo todo,
para dejar de sufrir y hacer más daño.
Decidir... con el corazón en el puño y apretado,
ahogando emociones, volviendo a congelarme.
Miedo... a volver a equivocarme. A no saber elegir. A interpretar mal mis sensaciones, volver a sufrir, volver a hacer daño... empezar a recostruir...
Miedo a cansarme a volver a fracasar a no elegir el camino adecuado...
Y miedo a no hacer nada. A dejarlo pasar, a pensar que pierdo una oportunidad.
Las personas importantes en la vida, llegan cuando menos lo esperas. Pero cuando aparecen, y tras el desajuste que produce al principio una situación a la que no estas acostumbrado, deseas que formen parte de tu vida, de una forma u otra.
Y uno puede llegar a despertar día tras día sonriendo, pensando, y agradeciendo que haya sucedido, que esa persona haya aparecido.
Me alegra pensar que pequeñas decisiones, de la forma más inesperada puedan dar grandes alegrías, y puedan marcar tu vida irremediablemente.
Por situaciones a lo largo de una vida, uno se olvida que dentro del pecho hay un corazón, y llega a olvidar como era el sonido de sus propios latidos... Te acostumbras a la soledad, a la falta de complicidad por parte de otra persona, y terminas transformando una viscera tan llena de sensaciones como es el corazón, en un témpano de hielo.
Pero derrepente eso cambia. Y te das cuenta de que efectivamente, lo que hay ahí dentro del pecho, sigue latiendo, y poco a poco va cogiendo fuerza... tanto que sientes en ocasiones como una presión interna te ahoga, ante esa situación que comienzas a vivir... si quieres comenzar a hacerlo.
y ese corazón late rítmicamente, pero solo piensas en hacerlo sonar al unísono con el de esa otra persona... que te ha hecho recordar lo que significa estar vivo.
Muchas personas afirman que me conocen: amigos, familiares, compañeros de trabajo... Y hasta cierto punto tienen razón, llegan a hacerlo: pueden saber de mi cual es mi equipo de fútbol favorito, o la película que más me gusta. Llegar a saber lo que me gusta leer, y también que tengo un genio bastante agrio cuando me levanto por la mañana...
Pero en su inmensa mayoría, no conocen la naturaleza de mis pasiones, sentimientos o emociones. No conocen la esencia de mi mismo.
Existe una parde en mi, otra forma de mi mismo, que no siempre puedo dar salida, no puedo dejar que se muestre tal y como es.
Vive conmigo, interiormente, y a veces solamente se tiene que conformar por ser escuchado solo por mi, porque pocas veces puedo permitirle que aflore a la superficie.
No siempre es fácil socialmente expresar lo que uno siente, piensa o sueña, y mucho menos fácil puede llegar a ser demostrarlo.
Aunque no finjo en mis tratos sociales, muchas veces me tengo que poner una máscara que siempre llevo conmigo, para pasar inadvertido, para evitar choques emocionales con los que me rodean sino reprimiera ciertos jucios o reacciones ante algunas situaciones en las cuales tomaría otras medidas...
Simplemente uso esa máscara siempre sonriente, y me silencio. Y sólo yo me escucho. Y, muchas veces, con eso es suficiente. Otras lloro internamente
Esta mañana una llamada de teléfono me sorprendía en mi oficina, era la voz entrecortada de mi madre, para darme una noticia esperada, pero aún asi no menos dolorosa. Mi abuela acababa de fallecer. El cáncer pudo mas que ella.
El día se precipitó de súbito... mañana por fín a la mañana la enterramos. Es dificil definir lo que se puede llegar a sentir cuando uno pierde a un ser cercano, pero es un cúmulo de sensaciones que ahogan, afixian y desesperan. Pero espero que muy prontito pase todo ya... muy pronto.
Me he negado ver a mi abuela postrada en esa tumba fría que le servirá de lecho eterno. Prefiero recordar sus risas, sus miradas complices, y sus chistes. Sus regañinas más bien bondadosas que amargas, y los chicles que me daba a escondidas por debajo de la mesa cuando mis padres no miraban.
Ahora escucho una canción de saratoga, que me identifico especialmente con estos párrafos:
Sé que el tiempo curará
Aunque nada siga igual
No me quiero resignar
No olvidaré
Yo que hasta el momento ignoraba
En el punto en que se hallaba
Esa enfermedad
Siento que la vida es como un hilo
Que se corta de improviso
Y sin avisar
Y en la oscura habitación
Necesito oír tu voz
Ahora duermes junto a mí
Esperaré...
Yaya, jamás seremos capaces de olvidarte. Sólo me arrepiento de no haber pasado más tiempo contigo que quizá malgasté haciendo otras cosas.
Tus risas, tus caricias, tus miradas... algo precioso que recordar.
Tus movimientos, tus destellos maravillosos cuando rozamos, cuando nos abrazamos, cuando me haces sentirme diferente, flotando, tan especial y a la vez único.
Noches, amaneceres, abrazos buscados, despedidas sinceras, miradas diciendo "te echaré de menos"... todos esos momentos que sólo contigo disfruto compartiendo.
Cada día busco en mi almohada el recuerdo de tu presencia, esa presencia necesitada, sufrida y querida
La búsqueda de nuevos sueños y nuevos propósitos hacen que nuestra vida sea fructífera, llena de sabores agradables, y merezca la pena ser disfrutada. aunque muchas veces parezca que estamos rodeados de nubarrones, tenemos que tratar de buscar esos rallitos de luz que entre alguna nube se cuelan... Pronto esos nubarrones pasarán, y se podrá ver forma cristalina.
Yo quiero que algunos nubarrones pasen, pero me dejen buen sabor de boca. Necesito sueños, me alimento de sueños, porque me encanta soñar, soy un soñador. Y gracias, que siempre tengo un sueño en mi vida, un propósito, una lucha, a pesar de que muchas veces aparezcan esos nubarrones.
Qué sería de nuestra vida sino fuera por nuestros sueños ?
Olvidar... es lo que muchas veces necesito. Descansar de todo, defugiarme en mi mismo, y evitar que a mi cabeza vengan imágenes de mis malas decisiones, recuerdos de lo que un día fué, y ahora no es, ilusiones de lo que pudo haber sido, y hoy por hoy está perdido.
Olvidar... hacer que heridas se cierren, y hacer que nueva sangre vuelva a llenar mis venas...
Mi sangre... ese torrente tan arrasador que da forma a mis pasiones, ilusiones y sueños.
Pero vez tras vez tengo la impresión de llegar tarde. Nunca parece ser el momento para poder desinfectarme.
Es verdad que todo es efímero, que no hay nada que dure para siempre ? Es una cuestión de vida... obsesiones, ilusiones, sueños, ideales van siendo reemplazados en el transcurso de una vida... incluso el amor. Hay veces que uno llega a pensar que con la persona con la que está, su amor por ella durará para siempre. Y se lucha por ello... pero quizá estas cosas simplemente cambien, se vayan transformando, y nosotros no seamos coscientes de que simplemente va madurando, y nos empeñamos en que lo estamos perdiendo...
Es difícil determinar si existe algo en esta vida que pueda durarnos eternamente, partiendo de la base de que nuestra propia existencia no es muy larga que se diga...
Pero de lo que sí somos conscientes es que todos experimentamos sensaciones o sentimientos que sí queremos que duren para siempre. Y en definitiva lo que realmente nos importa es eso, el deseo de durabilidad. El resultado final de las cosas ya no está en nuestras manos, lo que sí depende de nosotros es el empeño que pongamos para que ese sentimiento especial dure.
Echo de menos tus caricias, tus miradas tus besos y tus amaneceres. Acariciar tu pelo, besar tu piel, oler tu torrente de perfumes, mezclados con el tuyo propio, personal, inigualable.
Echo de menos nuestras sonrisas complices, nuestros juegos ocultos, nuestras escapadas a nuestros paraisos.
Echo de menos despreocuparme, dejarme llevar por tu alma, con los ojos cerrados, como tantas otras veces he hecho.
Pero solo puedo tenerlos abiertos, y veo tantas cosas que puedo haber perdido... a cambio de que ? Es tan dificil aguantar una vela encendida en la fria lluvia de noviembre...
A veces se pierde la dirección, el sentido, y la guia en esta vida, nuestras metas. Muchas veces los mismos problemas de a la vida hace que se pierdan momentaneamente los sueños e ilusiones.
Pero por suerte es momentáneo. Se nos tienden manos amigas, manos que nos ayudan a levantarnos y seguir luchando contra los temporales, y capear los altibajos y las malas rachas que todos atravesamos...
Y hay veces que esas manos nos ayudan a ver mas alla del sol, que a veces nos ciega. Nos enseña que tenemos un universo de estrellas, y que no tenemos que conformarnos con la mas cercana. Manos amigas especiales, sensacionales, que uno agarra con fuerza y la utiliza para volar, para seguir adelante...
Por suerte, en diversas etapas de esta vida, yo me he encontrado con estas manos, manos incluso que me ayudaron a ver mas alla del sol, manos que me hicieron levantarme hasta alturas que no creia posibles para mi.
Espero algún día poder ser yo esa clase de mano para devolverles el favor... y ser capaz de elevarles hasta donde se merecen.
Una de las cosas más difíciles de esta vida es cerrar etapas, y poder abrir otras nuevas. De esto mismo ya he hablado en este blog, pero como la vida misma, las situaciones se repiten, se reproducen, y te vuelven los sinsabores a la boca... hay veces que uno no sabe si ha tomado la mejor decisión, y cuando vuelve a enfrentarse a las consecuencias de la misma, multitud de factores hacen que uno se replantee si tomo la decisión correcta.
Cuando todas las piezas deberían encajar, cuando parece que el puzle de la vida esta adecuadamente resuelto, en mi vida no todo encaja con esa facilidad. Tengo una pieza que no soy capaz de encajar. Mentalmente me digo a mi mismo dónde debe estar, cual debe de ser su sitio, pero el alma me impulsa a hacer otra serie de cosas... y a veces me comprometo a mi mismo y a esta piececita, tan importante para mí. No consigo que mi mente y mi corazón sintonicen, no consigo hacer que hablen el mismo idioma... y mientras tanto, esta pieza da vueltas en mi vida, ahogándome en angustia, como ahora me sucede, ante la duda, ante mi mar de agonías, ante mi continuo debate sin solución, ante mis quebraderos afixiantes...
Si tan sólo pudiera colocarte donde quiero... pero no puedo. Algo dentro de mí hace que mi dedo no te empuje, y te encaje perfectamente en el hueco que parece que esta hecho para ti en el puzle de mi vida. Y si tan sólo consiguiera hacer eso, todo sería completo: encajarías mi cielo, mis estrellas y mis ilusiones. Pero mientras siga sin el valor suficiente para colocarte ahí, nada de eso puede ser. Y me ahogo. Poco a poco noto como me ahogo. Pero conseguiré sacar la nariz para respirar, solo necesito tiempo... y lo conseguiré.
Hay veces que sueño despierto, ensimismado, me gusta mirar alrededor de mi mientras mi cabeza discurre con mis ideas.
Muchas sonrisas vienen a mi cara, recordando momentos especiales, sensacionales. Ayer me encontre con un viejo amigo, hacía casi dos años que no le veía, y ayer me vino a buscar a la oficina. Vino a buscarme para darme la invitación de su boda. Sí, en septiembre se casa, con aquella chica tímida que yo mismo le presente (de esto me siento orgulloso).
Esta mañana soñaba y recordaba, los tiempos en los que él y yo nos comíamos Madrid, las veces que nos hemos reído, e incluso las veces que hemos llorado juntos.
Es curiosa la facilidad con la que la distancia puede abrir una brecha entre dos personas, pero hay veces, que esa brecha se cierra casi instantaneamente cuando vuelves a ver a ese alguien... pero hasta que eso sucede, te has perdido multitud de vivencias intermedias, entre ambas etapas de alejamiento y vuelta al acercamiento...
Y la vida sigue, y la gente continua con sus sueños, y no podemos evitar echar de menos esas etapas en las que esa persona estaba mas cerca de nosotros, pero eso no es posible... simplemente la vida avanza y nosotros con ella. Cada unos con sus sueños, y eso hace, que estos muchas veces a ti y a mi nos separen. Solo espero volver a encontrarnos de nuevo, con sueños comunes, con fantasias compartidas, en algún momento de nuestra vida, porque me soñar contigo y saber que has estado ahí, marcando parte de mi vida, marcando mi persona.
Y el tiempo pasa y vuela, y no me doy cuenta de que por hoy, ya es suficiente. Lo que hubiera dado por parar el tiempo en ese momento...
Pero en mi mente se detuvo. Ahí se paró. El tiempo me agarro y me detuvo, haciendo momentos, eternos. Haciendo instantes fugaces, en recuerdos perdurables.
Mi mente grabó cada secuencia, cada segundo, cada detalle, y lo repite.
¿No es esto detener el tiempo?
Vamos a huir de todo esto... simplemente refugiate en mi, como a mi me gustaría hacerlo en tí. Costruye conmigo nuestra isla de sueños, forjada en la templanza de nuestros sentimientos, en la nobleza de nuestras pasiones, y en la sinceridad de nuestros ojos.
Es fácil. Agarra mi mano, siente como mi pulso se sincroniza con el tuyo y como mi piel se mezcla con tus olores.
Permite que nuestra isla de sueños nos moldee, nos una bajo una misma capa indivisible de ilusiones.
Deja que mis sueños te arropen. No sentiras más el sueño de un alma en soledad, ni la nostalgia de la falta de esperanza, permíteme hacerte vivir ese sueño que tú has creado en mí, y hacerlo crecer hasta que conforme nuestras vidas.
Guárdate el frasco si quieres,
con sus adornos y detalles,
que yo me quedo con el contenido.
Llevate la palabreria,
los grandes objetivos,
y déjame con la sonrisa del niño,
con el sol arañando mi cara cada día,
con el abrazo de mi amigo.
Para tí la fama,
los grandes eventos
y los grandes sueños sin sentimiento.
Yo solo quiero la caricia de una ducha,
el olor de una sábana limpia,
una sonrisa cómplice furtiva,
el sabor de un beso robado.
Miradas anónimas, miradas furtivas.
Desconocidos somos, y cada día
nos encontramos.
Tú, con tu vida.
Yo, con mis sueños.
A veces tu vida formaba parte de mis sueños.
A veces tu vida era mi sueño.
Hoy tengo tu mirada, furtiva y anónima.
Sólamente me queda eso.
¿Cuándo desapareció todo lo demás?
El tiempo y el desgaste se lo llevó,
y me dejó tan solo tu mirada.
Cómo desearía no tenerla.
Me duele mirarte,
recordar lo que antes éramos,
y lo que con el tiempo
hemos perdido.
Puertas que se abren, y puertas que se cierran, la vida esta llena de ellas. Puentes que hay que decidir cual cruzar, y saber cual de todos hay que quemar... quiza sea lo mas dificil de la vida, pero a la vez es lo que la hace tan apasionante. Saber cuando uno se ha equivocado, luchar por rectificarlo, y ganar por lo menos un pulso a las equivocaciones que todos en esta vida tenemos.
Hay que remar, remar muy fuerte, para conducirse por este rio. Muchas veces es fácil dejarse llevar por la corriente, por la rutina, por la costumbre y el hábiito... y no reconocemos que eso nos destruye por dentro. Poco a poco nos desgasta... es como la termita al mueble... por fuera parece que está intacto pero interiormente es todo astillas.
Yo no quiero quedarme en astillas, por eso, por mucho que me cueste, muchas veces trato de evitar las rutinas y las costumbres, rectificar las malas decisiones, y buscar la forma de encauzarme remando, cada vez que note que el rio me arrastra. No quiero encontrarme inesperadamente cayendo por una catarata...
Qué manera de soñar... cada día me gusta más soñar, despertarme con la satisfación de haber estado despierto en sueños, agarrar los últimos segundos que me mantienen despierto durante la noche, buscar esos últimos pensamientos que me provocan esa sonrisa, de alegría y satisfacción, y dormir apaciblemente manteniéndola en mi cara... y con un poco de suerte me vuelvo a despertar con esa sonrisa por la mañana, si el despertador no me molesta demasiado.
Anoche lo volví a conseguir, sonreir antes de dormirme. Me encanta soñar sonriendo. Me encanta soñar despierto.
Necesitaría que me calentara, me iluminara, y me mostrara hacia dónde ir... hay veces que es tan dificil encontrar uno...
Que me tocara, me susurrara, que me apartara de la densa oscuridad, y me mostrara el sendero del tiempo, curando y cerrando etapas, arreglando y mostrando otras nuevas, evitando otros momentos... un rayo de luz, que me tendiera una mano. Aunque no me apeteciera cogérsela.
Dime lo que pienses. No te lo calles. ¿No sabes que ocultar las cosas, o esconderlas, al final las empeora? Por favor, la proxima vez hazlo. No puedo actuar con normalidad cuando noto que te alejas, cuando siento que algo te pasa, y no se exactamente que es. ¿No entiendes que, si tu te alejas, incoscientemente lo hago yo tambien? ¿No sabes que, mi abrigo contra tu frio, es el refugio de mi calor interno? Mi soledad, mi quietud, mi calma, mi escudo... todo tras mi coraza.
Cierro mis puertas, las cierro con llave y la pierdo. Las espinas y las enredaderas vuelven a crecer donde hace un tiempo ya estuvieron, clavandose en mi corazon, y haciendome sangrar otra vez. Abriendo heridas mal cicatrizadas...
Picando el hielo de mi corazón hoy por hoy solo se puede sacar escarcha... escarcha de las gelidas heridas mal cicatrizadas, heridas que no permiten que nueva sabia penetre... heridas frias y duras, que encierran el dolor, y lo hacen brotar con el desaliento de un alma que se consume.
Déjadme fluir... huid de mí! Malos recuerdos, falsas esperanzas, dolorosas decisiones!! No me hagais perder el tren, que pocas veces vuelve a pasar por la misma estación, y me canso de estar de pie en el anden...
Estoy tan cansado... Esta semana esta siendo tan dura que creo que no llego al fin de semana con lo cerquita que esta...
Necesito descansar mucho estos días porque la semana próxima también sera dura...
Me refugiaré entre sueños de nubes, entre aguas azules y entre horas de sueño por recuperar, para cargar energias y aráñar minutos de quietud.
Abro la ventana... que gusto da recibir los rayos de sol. Por fín vuelve a brillar. Es un pequeño placer que me permito. Cerrar los ojos y notar como me da el sol en la cara, entrecerrar los ojos y mirar a las lejanas nubes mientras algun buen pensamiento llena mi cabeza... respiro.
Intento que mi día este plagado de pequeños momentos que hagan este día mas agradable, duradero.
Cierro la ventana, giro la vista y veo los cascos de mi reproductor... una buena canción... cuanto me apetece escuchar una buena canción...
Colecciono pequeños momentos, si tienes alguno para prestarme, te lo agradecería, nunca se sabe cuando lo puedo necesitar :)
A veces sería tan fácil cerrar los ojos y continuar hacia delante, guiándose sin la razón y haciéndo solamente lo que el corazón dicta... pero eso es sólo a veces. Otras tantas, es mucho peor las consecuencias de dejarse llevar por una corazonada que pensarlo previamente.
Pero por mucho pensar... se pueden escapar grandes ocasiones.
Si me cruzo contigo, por favor, sonríeme. No cuesta tanto trabajo, es un gesto tranquilizador, y no sabes nunca quien se puede enamorar de una sonrisa.
A mí, sonríeme. Hay veces que no tengo fuerzas para seguir yo solo, por eso déjame que tome la energía que me transmites con tu gesto.
Regálame una sonrisa. Como recompensa, como mínimo, recibirás la mía.
Programa,programa,programa,programa,programa,programa,programa,
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Madre mia necesito salir a un parque que me de el sol ! que ya va haciendo buen tiempo...
Cómo envidio tu aroma, dijo el pájaro a la flor.
Y yo envidio tu vuelo, gentil la flor contestó.
El hombre, con su arrogancia, falto de aroma y color,
y sin poder dejar el suelo, flor y pájaro mató.
- José Narosky
Una noche mas llega,
Aquí continuo, solo.
Una parte mia salió por la puerta.
Hay ciertas cosas, a las que uno
nunca llega a acostumbrarse.
Situaciones, momentos, finales.
¿Es realmente necesario que todo tenga un final?
¿Existe algo humano imperecedero como el mismisimo tiempo?
No quiero seguir despidiendome,
no me gusta llegar a los finales,
no quiero sufrir una noche mas...
melancolía (gr. y lat. -cholía, bilis negra)
1 f. Tristeza vaga, profunda y permanente.
2 Monomanía en que dominan las afecciones morales tristes.
Melancólia... muchas veces, este profundo sentimiento se aferra en nuestros sentidos que solo perciben colores grises, esperando mejores tiempos, añorando ese pasado de esos colores tan vivos..
"donde mi fantasía,
como una lanzadera,
trama y urde un paisaje de azul melancolía."
Por suerte, al final del tunel, siempre se encuentra una salida. Yo he entrado muchas veces en ese tunel, he sentido cómo una dedos largos y helados, acariciaban suavemente mi corazón, he sentido su beso de escarcha, he sentido a la melancolía como mi única compañera... pero tarde o temprano, ella me deja. Si, fiel compañera, nada deseable por nadie. Pero siempre, hasta ahora, he encontrado la salida de los tuneles de mi vida.
Cuando te abraza, es dificil soltarse. Pero nadie dijo que vivir fuera sencillo...
Imagino que a vosotros tambien os pasa, que en determinadas epocas de vuestra vida os obsesionais con algo en concreto... yo actualmente lo estoy con una cancion: Blue "cant breathe easy"
Digamos que ultimamente me pueden haber pasado ciertas cosas, que las uno directamente con esta canción, y que no paro de ponerla y ponerla, y la escucho cada dos por tres, y no puedo evitar el reevivir sensaciones...
Parte del estribillo dice algo asi como:
"I...................Can't breathe easy
No I...
I can't dream you had another dream without you lying next to me, there's no air
There's no air"
Uno de los estribillos que quizá, mas me hayan llegado ultimamente.
Vosotros... teneis alguna obsesión reciente en concreto ?
La confianza en alguien puede llevar años el conseguirla, pero simplemente un descuido de unos minutos puede servir para que toda esa confianza se pierda, se disipe, desaparezca.
Abrir y cerrar de ojos. Eso es. Y todo desaparece. Uno quiza se puede esforzar por cambiar ciertos habitos, rutinas, actitudes... para ganarse esa confianza tan preciada, y a veces, necesitada. Y con esfuerzo, y trabajo, se puede ganar esa confianza de ese alguien tan especial, o quiza recobrar esa complicidad que se pudo haber perdido en un momento, con uno de estos descuidos.
Pero el peligro sigue ahi, latente. Inexorablemente se abre camino al menor descuido, y vuelve a aflorar la desconfianza. Asi de sencillo. Baja la guardia, comete un error, y algo que te costo mucho conseguir, lo pierdes. Todo.
Pero asi es como actua la confianza. Es un soplo de vida que sino se cuida y se protege, se puede echar a perder, y puede que no se vuelva recuperar de ninguna de las maneras. Y con ella, una parte de ti mismo se desvanece. Como las burbujas de una pildora efervescente.
Hoy me he despertado..
y todo sigue igual,
tu estas a mi lado.. dormida.
Con las manos en la nuca miro al techo,
y puedo recordar, todos aquellos dias...
¿que es lo q hacemos aqui? dimelo!
Siempre es igual...
Hay mucha gente,
mucho ruido,
es la misma vida,
hay un armario,
y la ventana esta llena de luz..
la ropa por el suelo..
ya amanecio.
Y cuando te despiertes,
dime que me quieres,
abrazame,
que yo sabre lo q tengo que hacer.
Y derrepente, todo esta parado. Nada se mueve. Parece que no avanzo. Por mas que me esfuerzo por cambiar las cosas, por seguir hacia delante, sigo aqui parado. no me muevo. Todo se ha detenido a mi alrededor.
Una sensación que colapsa mis sentidos, y me llena de impotencia. Necesito cambiar ciertas cosas, y hacerlo ya. Esto no puede seguir así mucho mas tiempo.
Nunca llueve eternamente...
¿Por qué me miras?
No quiero que lo hagas.
Simplemente no me apetece.
Aparta tus ojos de mí, por favor.
Deja de clavarme esa mirada...
veo tantos reproches...
No quiero que sigas.
Déjame irme tranquilo,
necesito despejarme,
necesito sentirme libre de esa mirada,
que me acorrala, y me sume en una profunda desesperación.
Lo siento, nunca quise hacerte daño.
Nunca fué mi intención.